Detrás de un expediente…

Los tres documentos propios del Trabajo Social: Ficha Social, Historia Social e Informe Social son algunos de los que pueden conformar un expediente social. Los expedientes los vamos construyendo con múltiples documentos que les requerimos a las personas (DNI, libros de familia, justificantes de ingresos, de desempleo, tarjetas sanitarias, certificados de discapacidad,…) además del propio relato de vivencias, necesidades y deseos expresados en las entrevistas sociales. Antes acumulábamos centenares de archivos con las historias vitales de las personas con las que trabajábamos, ahora todo está digitalizado y con un par de clic de ratón se despliega tras la pantalla del ordenador la vida y milagros de la gente. Cada vez más burocratizada, cada vez más reducida a informes, tras informes y más informes para acceder a una miserable prestación con la que ni siquiera se puede sobrevivir dignamente… Y cuidado con quejarse, que las y los pobres bastante han de agradecer al dadivoso sistema que permite que no mueran de hambre (mode ironic on) … ¿o no?   Sigue leyendo Detrás de un expediente…

Mujeres coraje

A las puertas del fin de un año y el comienzo de otro, toca hacer balance y reflexiones sobre este 2022. Quienes siguen mis post habrán podido comprobar el halo de pesimismo que los envuelve (que no es otra cosa que realismo bien informado) y lo críticos que son con el sistema (patriarcal, capitalista, neoliberal,…) pero esta vez quiero poner en valor la labor anónima y silenciosa de centenares de mujeres, principalmente, que son las sostienen el sistema y el mundo, y que sin ellas, esto ya se hubiera ido al traste hace mucho. Así que, en este final de año, quiero agradecer:  Sigue leyendo Mujeres coraje

Reflexiones sobre intervención social con la infancia y adolescencia

En el día mundial de la infancia, me gustaría reflexionar sobre la protección a la misma en contextos de vulnerabilidad. Llevo más de 30 años como trabajadora social y en ellos siempre he tenido que trabajar con niñas, niños y adolescentes, de manera directa o indirecta. Cuando empecé, allá por los 90, la intervención se centraba en “la familia”, es decir, en las personas adultas y especialmente las mujeres / madres, los padres ni estaban ni se les esperaba, es más, en ocasiones boicoteaban la intervención con las mujeres, negándose a que estas participaran en actividades formativas para el empleo o acudieran al recurso en el que trabajaba. En aquella época, recién salida de la Escuela Universitaria de Trabajo Social, reconozco que realizaba intervenciones muy adultocéntricas y que se escuchaba poco a las criaturas, aunque sí hiciéramos acciones con ellas (campamentos y otras actividades formativas y lúdicas).  Sigue leyendo Reflexiones sobre intervención social con la infancia y adolescencia

Cuando la libertad cuesta la vida

Hace algo más de un año una mujer se presentó a unas elecciones autonómicas con una sola palabra en la comunicación que envío a sus votantes: “Libertad”. Arrasó y obtuvo mayoría absoluta. Fue el premio a la libertad de condenar a muerte a miles de personas mayores durante el inicio de la pandemia por COVID-19, al promover un protocolo sanitario demencial que no garantizaba su atención médica; el premio al desmantelamiento de la sanidad madrileña y de buena parte de los servicios públicos. Pero para qué necesitamos sanidad o educación, teniendo la libertad de no encontrarte con tu ex…  Sigue leyendo Cuando la libertad cuesta la vida

¿Controlas o liberas?

Estoy realmente desmotivada para escribir pero me insto a cumplir con mi compromiso de escribir un post mensual (salvo en períodos vacacionales), así que voy a reflexionar sobre hechos recientes de mi vida profesional y algunas críticas que me han hecho llegar a través de redes sociales sobre el papel de control social que ejercemos las trabajadoras sociales.  Sigue leyendo ¿Controlas o liberas?

¿Dónde están los hombres buenos? Reflexiones sobre masculinidades hegemónicas

He visto recientemente una imagen en redes sociales que decía algo así: “todo el mundo conoce a una mujer maltratada en su entorno cercano, pero nadie conoce a un maltratador: no salen las cuentas”. Y efectivamente, seguimos poniendo el foco en las víctimas y no en los verdugos. Esa frase me hizo pensar en mi entorno cercano, familia y amigas, y me he puesto a contar. He elegido 10 mujeres de mi familia y 10 amigas; de la familia he contado 4 mujeres víctimas de violencia, de las amigas 6, algunas con violencias tan graves que sus maltratadores han acabado en prisión (un caso) y en otro con una violencia sexual flagrante que ella no identifica como tal y continúa con su agresor… Por tanto, 10 de 20, el 50%. ¿Quiere esto decir que tengo un entorno cercano lleno de maltratadores y el resto del mundo vive feliz en los mundos de Yupi? No, quiere decir que no estamos contando bien o que todavía nos da pudor reconocer que vivimos rodeadas de agresores de todo tipo.  Sigue leyendo ¿Dónde están los hombres buenos? Reflexiones sobre masculinidades hegemónicas

Confrontaciones

Finaliza otro curso escolar en medio de una guerra, de masacre de vidas humanas que no importan a nadie (léase valla de Melilla) y de una cumbre de la OTAN en nuestro país que están vendiendo como un acontecimiento histórico y que, a mí, particularmente, me da pavor. Tengo la sensación de estar asistiendo al diseño de la tercera guerra mundial sin poder hacer nada para evitarlo.  Sigue leyendo Confrontaciones

Transparencias

Escribo este post en semana santa y me retrotrae a recuerdos de la infancia, donde había que estrenar ropa, recatada eso sí, para ir a las procesiones. Nada de transparencias ni ostentaciones. Con el paso del tiempo, esta semana vacacional dio paso a mayor ornamento en el vestuario y, por qué no, alguna transparencia para mitigar el calor que podía hacer entre las aglomeraciones de personas procesionando. Lo que más me gustaba de estos eventos era el olor a incienso… pero no nos desviemos.  Sigue leyendo Transparencias

Frivolidades, malestares y distopías

En semanas pasadas las redes ardieron por un comentario de Ana Botín que afirmaba haber bajado su calefacción a 17 grados para contribuir a la crisis generada por la guerra contra Ucrania. Recibió respuestas muy inteligentes que decían que si bajaba las comisiones de su banco ya lo bordaba. Un banco que en 2021 reportó 8.124 millones de euros de beneficios, por cierto. A veces, cuando oigo hablar a las personas ricas (hombres en su mayoría, lo de Ana Botín es una excepción en el Ibex-35), pienso que viven en otro planeta. Miles de personas ni siquiera se pueden permitir el uso de calefacción; en Canarias vivimos en un lugar privilegiado y, salvo en determinadas zonas, no se suele usar calefacción, pero pienso en quienes viven en la Cañada Real en Madrid, leo las declaraciones de Botín y creo que cada vez más se abre un abismo insondable entre determinados contextos.  Sigue leyendo Frivolidades, malestares y distopías