A un país que juzga a quien investiga las violaciones de Derechos Humanos que supusieron los crímenes franquistas en lugar de juzgar a quienes los cometieron, le falla algo. Le falla su sentido de la ética, de la justicia universal,… de lo que es decente. Por si España no tuviera bastante publicidad como sitio de «fandango y pandereta», o de sol y playa, ahora es famosa en el mundo entero por juzgar al emblemático juez Garzón, que creo que se le podrá acusar de muchas cosas pero no precisamente de prevaricador. A partir de ahora nos podremos promocionar en Fitur con tours guiados de corrupciones y fascistadas varias, que será lo más destacable que este país podrá ofrecer al mundo al paso que vamos.
Y mientras «Manos Limpias» nos ameniza esta semana, la atención sobre los recortes del gobierno y la futura recesión económica que se avecina pasará más desapercibida al tiempo que los bolsillos de banqueros y otra ralea se siguen llenando y los de la gente honrada y trabajadora se vacían.
Una que no entiende de políticas macroeconómicas se pregunta cómo se puede reactivar una economía y crear empleo, subiendo los impuestos a la población trabajadora = menos dinero para consumir + desempleo al estancarse el consumo. ¿Y realmente alguien se traga que así se va a solucionar la crisis?