Siempre suelo hacer alguna actividad específica con mi alumnado en torno al 8 de marzo, esta semana, con 22 alumnas y 1 alumno de 2º de Grado en Trabajo Social, reflexionamos sobre corresponsabilidad, por una parte, y liderazgos feministas, por otra; no voy a contar a quiénes consideran líderes y referentes, eso daría para otro post, pero cuando pregunté si sabían por qué se conmemoraba el 8M, sólo una alumna acertó a decir algo sobre una fábrica en la que habían muerto muchas mujeres… Pregunté si en sus IES habían trabajado sobre el origen de esta fecha y, aunque mayoritariamente dijeron que sí, salvo alguna excepción, lo trabajado se reducía a carteles sobre igualdad y algunas charlas… Está visto que esas charlas no permearon demasiado. ¿Qué hemos de hacer para que el feminismo cale profundamente? Tengo la sensación, en muchos casos, que se queda en la superficie, que se piensa que todo está logrado cuando, paradójicamente, los chicos jóvenes reactivan cada vez más ante la igualdad. Estamos asistiendo a un retroceso brutal y a discursos abiertamente machistas, legitimados desde el poder político (pinchad aquí, sin ir más lejos) que están calando en una parte de la población más rápidamente que siglos de feminismo. Algo nos tenemos que replantear. Sigue leyendo Todos los días han de ser 8 de marzo, todos los días han de ser feministas