Esta frase ha sido un lema de los últimos 8 de marzo, lo he visto en varias pancartas y me encantó. Ahora ya no se utiliza tanto el término “histérica” en determinados contextos, pero se ha sustituido por otros similares que en el fondo vienen a decir lo mismo: cuestionar la capacidad de enfado, rabia y voz de las mujeres que se molestan ante decisiones o actuaciones machistas sin sentido. Este post ha sido inspirado por la intensidad de mi amiga Clara Bredy, a la que recomiendo seguir en su blog y a la que deseo siga viviendo la vida de esa manera intensa, y por este artículo (pincha aquí) también facilitado por ella y que recomiendo encarecidamente. Sigue leyendo No somos histéricas, somos históricas