Últimamente tengo la sensación de que hemos fracasado como especie, que vamos abocados a la autodestrucción y que las voces que pretenden frenarla se enfrentan a tal entramado de poder que resulta totalmente imposible vencerlo. A la ciudadanía solo nos dejan la calle, los gritos, los cánticos, la lucha pacífica y feminista,… pero frente a la corrupción, la psicopatía de nuestros gobernantes y la inacción y pasividad cómplice de burócratas sin alma, a nuestro mundo no le queda mucha esperanza… ni tiempo. Sigue leyendo Fracasos…